sábado, 26 de febrero de 2022

 Una semana tremenda

Guerra civil en la derecha española

¡Qué noche la de aquél día!

Mudos de asombro hemos asistido al grotesco espectáculo, "urbi et orbi", de las sucesivas diatribas de Isabel Díaz Ayuso y de Teodoro García Egea. 

Apenas vaciadas las botellas que se descorcharon para jalear la cuasi victoria de Mañueco en Castilla y León, el lugarteniente del sedicente líder de la oposición y la indisimulada aspirante a sucederlo, airearon sus diferencias con una saña digna de mejor causa.

¿Qué importa quién empezó el dislate? Isabel y Pablo, él 41 años, 44 ella, ambos jóvenes, ambiciosos y atolondrados han dado a su Partido la pedrada en el ojo de boticario que nadie esperaba. 

¿De qué fuente han bebido la ciencia política estos alevines? Es todo tan insustancial, tan falto de categoría, tan alejado de la verdadera política, la de las ideas, las estrategias, las grandes causas, la del servicio al bien común…

Casado y Díaz Ayuso venían de la misma familia, crecieron juntos, eran amigos, compartían padrinos, decían que filias y fobias… y prisa, mucha prisa, demasiada prisa. Ninguno de los dos da la talla. Casado tuvo la "Potestas", pero nunca ostentó la "Auctoritas", por eso ha perdido. Díaz Ayuso ha demostrado inmadurez, petulancia e imprudencia. Tampoco ha ganado, y si lo dudan, dejen pasar un tiempito. 

Apenas una semana después Casado es ya una momia política. Sólo tres de sus fieles le siguieron cuando abandonaba su escaño el pasado miércoles. El resto… Lanzada a moro muerto, ahora que ya no puede ni siquiera regañarles ¡Nunca fui un admirador suyo, pero les aseguro que me dio pena! En cuanto a Dª Isabel, no lo duden, pagará su precio: jamás se alojará en La Moncloa; su estentórea salida de tono lo hace inviable.

Hay quien dice que de todo este vodevil, han salido ganando Sánchez y Abascal. Es posible; veremos hasta cuándo y hasta dónde. Yo creo que ha perdido España, porque el país que casi todos queremos necesita una derecha y una izquierda que compitan por la inestable, indefinible, etérea e insegura franja central de los votantes: esos seiscientos o setecientos mil ciudadanos capaces de votar ora a la izquierda ora a la derecha, siempre que ni una ni otra amenacen con tirarse al monte. Lo que han hecho estos insensatos crispa y no templa, crea nuevas banderías, justo en el peor momento posible.

Este estrafalario episodio no es un fenómeno exclusivo de celtiberia. La crisis del PP es solamente una réplica más del seísmo que antes ha sacudido a Francia, al Reino Unido, a Italia, Holanda, Austria. El resultado siempre termina siendo el mismo: la irrelevancia de las formaciones que hace tres cuartos de siglo configuraron la Europa con que la mayoría seguimos soñando, sustituidas por Partidos cuyas señas de identidad son el euroescepticismo, la xenofobia, el populismo, la añoranza de los tiempos en los que se marcaba el paso de la oca y se saludaba brazo en alto.

Podría ser que, pese a todo, la ópera bufa con que nos han obsequiado estos dos badulaques esté controlada. Dicen que Casado ya tiene sucesor y que Sánchez no pretende aprovechar la ocasión para adelantar elecciones. Esperemos que ambas cosas sean ciertas.

En resumen

  • Bien está, si así es… Pero ¿recuerdan que lo de no adelantar las elecciones lo ha dicho el mismo que aseguraba que sería incapaz de conciliar el sueño con Iglesias a su vera?
  • Cruzo los dedos para que este despropósito no termine como cantaba una anónima copla del XIX:  

Salieron seis toros

los seis mansos fueron

y esta fue la causa

de quemar conventos.


El Zar Putin se quitó la careta

Como temíamos

Poco importan las mentiras que desgrane para su pueblo. Puede jurar que sólo trata de evitar la limpieza étnica del Gobierno ucraniano en las zonas pro rusas del este del país. Podrá asegurar que ha hecho esto o aquello y que los ucranianos hacen o dejan de hacer lo que ninguno de sus maniatados medios de comunicación osará negar. 

Le hemos oído decir que ha entrado en Ucrania para "desnazificarla"; sabe que nadie le cree pero es su manera de mostrarnos su estatura moral: su proceder, en un tiempo en el que las imágenes de la guerra llegan a las pantallas de todo el planeta en tiempo real es absolutamente transparente.

Como estaba previsto fiel a su cita con la infamia, Putin ha dado orden de avanzar y su formidable maquinaria guerrera ha entrado en suelo ucraniano. Ha atacado a un país soberano por el este, por el norte y por el sur. En poco más de veinticuatro horas ha llegado Kiev.

Comenzó reconociendo la independencia del territorio fronterizo que él mismo había armado y alentado desde hace seis, siete u ocho años, y ahora acude en su "ayuda" para evitar que Ucrania masacre a sus marionetas.

Lamento haber acertado en mis reflexiones, pero en este mismo blog, hace un mes escribí estos párrafos:

22 de enero

  • ¿Utilizará Putin el recurso a prefabricar un "casus belli" artificial? No habría que descartarlo. Solidarizarse y "ayudar" a las autoproclamadas repúblicas del este de Ucrania, Donestk y Lugansk, descarada o manipuladamente pro rusas fundamentarían un plausible discurso útil en estas circunstancias.
  • Algunas declaraciones de Joe Biden permiten barruntar una cierta tolerancia norteamericana ante una posible invasión limitada a una parte de Ucrania. Le da margen para imponer sanciones económicas y financieras pero salvará la cara sin llegar al pulso militar directo. 

29 de enero

  • El problema no es si Ucrania puede o no entrar en la Alianza Atlántica, sino dónde y cuándo se frena a Putin. Hoy trata de conseguir el compromiso de que Ucrania no entrará nunca en la OTAN. Si lo consigue, pedirá el retorno a su área de influencia, primero de los territorios que fueron parte de la URRS y, más tarde, exigirá la obediencia de los países que estaban bajo su control antes de Gorbachov.

Nada nuevo en el este de Europa

Rusia retorna, pues, a su vieja, viejísima doctrina de seguridad: expansión territorial siempre que se pueda y creación de una zona limítrofe controlada que mantenga a las potencias europeas lejos de sus puntos neurálgicos.

Como Iván El Terrible que a mediados del XVI saltó los Urales y se expandió también por el oeste y el sur, como Pedro I que en 1721 se anexionó tierras suecas, como Catalina La Grande que pocos años más tarde, mediados del XVIII, absorbía tierras polacas y lituanas en el norte y Crimea en el sur. Una eternidad más tarde Stalin configuró su zona de seguridad rodeando a Rusia de Repúblicas vagamente independientes, pero, en realidad, sometidas a su absoluto control, Polonia, países bálticos, Hungría, Checoslovaquia, Bielorrusia, Bulgaria, Eslovenia, Rumanía. 

Putin retoma el rumbo, y a fe que está en condiciones de darnos más de un dolor de cabeza. No depende de su opinión interna, está dispuesto a utilizar cualquier medio para eliminar, incluso físicamente, a sus oponentes, no corre el peligro de verse cuestionado en periódicos y pantallas; al contrario, como buen dictador, puede convertir un conflicto externo en tapadera de carencias internas. Sus ciudadanos pagarán las consecuencias de su aventura pero unos lo asumirán con gusto y otros se verán impotentes para hacer nada más que lamentarse en sus casas

Los actores del drama

  • Rusia: Si la Rusia de que hablamos la personalizamos en Vladimir Putin, saldrá de ésta aventura macabra fortalecido. Seguirá adelante con las operaciones militares hasta conseguir sus objetivos. Ha llegado a Kiev y forzará una paz impuesta a un Gobierno obediente que no será el actual. Ucrania perderá otra parte de su territorio, el que ahora Putin ha reconocido como Repúblicas Independientes, y no descansará hasta convertir a lo que quede de su vecino en un país satélite  como ya lo es Bielorrusia. El enigma al que nos enfrentamos es si se dará por satisfecho con esta agresión o podrá el punto de mira en algún otro objetivo. No creo, sin embargo, que ose repetir la jugada con ningún país miembro de la OTAN
  • USA: Evitará la confrontación militar directa, amparándose en que Ucrania no forma parte de la OTAN y se dará por satisfecha con la gestión de represalias económicas de creciente intensidad. Poco más puede hacer en tanto los movimientos de Putin se limiten a Ucrania. De nada sirve lamentarse, pero esperemos que el precedente de la anexión de Crimea no sea a Putin como la del País de los Sudetes fue a Hitler.
  • China: Quiero pensar que su alianza con Rusia es más retórica que real. Sus intereses en estos momento no pasan por alentar la tercera guerra mundial, ni por convertir a Rusia en un rival que llegara a ser más peligroso que los Estados Unidos; un rival con el que comparte una frontera demasiado extensa y demasiado permeable. No obstante, sustituir a Europa como comprador del gas ruso, es un buen balón de oxígeno para Putin, ahora que se le avecinan dificultades económicas. 
  • Europa. (Digo Europa y no Unión Europea porque desde el punto de vista de americanos y rusos somos poco más que un club de veintisiete miembros vocingleros e indisciplinados, incapaces de ponerse de acuerdo cuando se nos exige que demos el do de pecho) Aplicaremos a Rusia las sanciones que sea menester, y pagaremos el precio que nos corresponda. Tardaremos más de lo previsto en recuperarnos de las sucesivas crisis que nos han azotado y, no lo olvidemos, si las cosas terminaran de torcerse, seríamos el campo de batalla donde otros vendrían a presumir de matones.  

¿Qué podemos hacer nosotros, los españoles?

  • ¿Hacer? Estar atentos, acudir donde se nos llame, cumplir con nuestros compromisos internacionales y actuar de acuerdo con lo que somos: un país miembro de la Unión Europea y de la OTAN.
  • Evitar trifulcas internas que nos creen problemas adicionales. Hay un tiempo para cada cosa. Los problemas no desaparecen, pero es preciso reordenar las prioridades: ahora es imprescindible que nos veamos y que nos vean como un Estado Soberano digno de tal nombre, no como una jaula de grillos.




sábado, 19 de febrero de 2022

Las urnas las carga el diablo

Resaca electoral

Por excepción, escribo este post hoy lunes, 14 de febrero, día de San Valentín, Día de los Enamorados según el Santoral comercial confeccionado por los monaguillos del Dios Mercado. No trato de glosar ni la imagen del Santo, ni la gracia consumista de la conmemoración, no, sino el evento electoral de ayer en la Comunidad autónoma de Castilla y León, la más extensa y menos poblada de España.

Quiero hacerlo en caliente, sin tiempo para oír y leer más comentarios. Incluso, créanme, me comprometo a no corregir mis primeras impresiones, las que ahora escribo, para que sean eso, apresuradas reflexiones sobre lo que ayer vivió la meseta norte.

Procuraré evitar datos y cifras tan sabidas ya por todos que sería ocioso repetirlas. Prefiero dedicarme no a los resultados sino a sus causas y sus probables consecuencias. 

Recuperemos el marco de referencia

Hemos estado oyendo alusiones constantes al Gobierno de coalición, a Sánchez, a los entresijos de la política nacional. Se ha dudado de si la decisión de convocar las elecciones se tomó en Valladolid o en Madrid, si el objetivo era el gobierno de la Comunidad o el de España.

  • Lo que ayer ocurrió no debería haber sido sino el enésimo evento electoral autonómico. Nada más. Votó Castilla y León, como antes lo habían hecho tantas otras veces, las restantes Comunidades Autónomas.
  • Sin embargo, el empecinamiento de los Estados Mayores de la mayoría de los Partidos Nacionales trató de cambiar su carácter y desvirtuar el acontecimiento, para convertirlo en una pieza más de la política nacional.
  • Fue así desde el principio hasta el final; hasta hoy, y mañana y la próxima semana y quién sabe hasta cuándo. Desde la convocatoria y sus razones, hasta los acuerdos que habrán de conseguirse en los días que vienen.
  • No deberíamos sacar las cosas de quicio: los resultados se han producido en un viejísimo territorio, quizás el alma cansada de España, que ha sido conservadora desde hace bastantes siglos. Las cosas no han cambiado.
  • Y, no obstante, en el mundo interconectado en que vivimos, España no es una excepción, de manera que sí, lo ocurrido ayer, traerá consecuencias más allá de los límites geográficos de la Comunidad

Ganadores y perdedores

En esta ocasión ha habido menos "ganadores" que de costumbre. Quiero decir que no he escuchado el guirigay habitual de turiferarios segundones reclamando el triunfo para su formación aunque los números, dijeran otra cosa. Socialistas, podemitas y ciudadanos no han negado la evidencia. Cuestión distinta es que no hayan resistido la tentación de regatearle el triunfo al PP, aunque haya sido el Partido más votado. Había margen para hacerlo y no han podido evitarlo.

Si les interesa mi punto de vista…

  • Ganadores, ganadores, lo que se dice "ganadores", sólo veo a Vox, por encima de todos los demás, y a las formaciones locales, sorianos, leoneses y avulenses, cuyo recorrido futuro está por ver. Todos los citados, especialmente Vox, pueden celebrar sus triunfos, sin resquicio para las dudas o las segundas interpretaciones.
  • ¿El PP? Ha sido el Partido más votado y ha incrementado los escaños obtenidos. Cierto, pero… no era eso lo que pretendía cuando adelantó las elecciones (no lo digo yo, lo dijeron ellos) y, desde luego, es más que dudoso que la Dirección Nacional y la autonómica se sientan más cómodos ahora con la inminente presión de Vox que conviviendo con un Partido como Ciudadanos en fase de liquidación por derribo.
  • Aún podríamos hilar más fino y aventurar la teoría de que una parte del PP, la representada por Aznar, Díaz Ayuso, Esperanza Aguirre, podría estar frotándose las manos, mientras otra, Casado, García Egea, Montesinos, Gamarra, estaría lamentando el error de cálculo cometido cuando inspiró o autorizó, qué más da, el adelanto electoral. ¿Recordará Casado el desplante a Abascal, ya saben "Hasta aquí hemos llegado: nosotros no somos como ustedes"? ¿Se le habrá olvidado a Don Santiago?
  • En la otra orilla, supongo que se habrán encontrado Ciudadanos y Unidas Podemos. No necesitan mucho sitio para juntarse a llorar: con un solitario Procurador por bando, hasta con una de las viejas cabinas de teléfono habrían tenido bastante. Ambos han sufrido un castigo tremendo; ambos han caído en la irrelevancia; ambos tienen mucho en qué pensar si quieren seguir en el juego político.
  • En cuanto al PSOE, su retroceso es un hecho. No importa que sigan siendo la cabeza visible de la oposición, carece de interés preguntarse qué les restó fuerza, si la gestión del Gobierno, la pujanza de las formaciones autóctonas o el trasvase evidente de los votos de Ciudadanos a Vox y de UP a los locales. Pueden decir que se han quedado como estaban, o casi. Pero, recuerden: seguir como antes, es perder, porque antes no habían ganado. Pese a todo, no ha sido algo que debiera extrañarles demasiado: la vieja meseta sigue siendo conservadora.

Las tonterías que se oyen en el muro de las lamentaciones

No quiero poner nombres a algunas de las frases que anoche escuché pero… ¡Hay que ver qué cosas puede hacer decir el cansancio!

  • No lo dude, querido amigo: el votante puede equivocarse (aunque no más que ciertos Diputados). Puede equivocarse, ya digo, pero echar la culpa de los resultados a la escasa perspicacia de los ciudadanos, es un insulto a la inteligencia. No, no a la inteligencia del elector, sino de quien tiene que escuchar semejante sandez.
  • Todos los Partidos tienen "suelo". Lo que me pregunto es si, en determinadas circunstancias especialmente penosas, además de suelo no tendrán también "subsuelo". Dicho de otra forma ¿tienen suelo las tumbas?
  • Lo malo de hablar con frases hechas, con lemas de Partido, es que a veces se coloca el dicharacho donde no toca. Por ejemplo: ¿"Cambio de ciclo" en Castilla León? Sólo si el PP hubiera perdido el Gobierno. Pero cuando se mantiene en el poder el Partido que lleva siete lustros ejerciéndolo ¿Qué ciclo ha cambiado?
  • Las formaciones locales, guste o no, son tan legítimas como los Grandes de toda la vida. En vez de lamentarse de que su presenciase ha restado votos, debería preguntarse de dónde han salido, por qué son votados y qué piensa hacer a partir de mañana. Lo peor del caso, es que ya había habido precedentes ("Teruel existe") y no se tomaron en serio.
  • ¿Por qué el voto perdido por Ciudadanos recala en Vox y no en el PP? ¿De qué se extrañan?¿El PP que les ha segado la hierba bajo los pies contaba con esos votos? Algunos habrán votado a Vox por Vox pero muchos lo habrán hecho contra el PP. Y otro tanto podría aplicarse a quien pueda extrañarse de que el antiguo voto indignado haya huido de Unidas Podemos y en vez de sumarse al socio madrileño de Gobierno, acabe en el saco de las candidaturas locales.

De ahora en adelante

Si de algo han valido estas elecciones es para poner en evidencia que conservadores y socialistas comparten un problema gemelo: el acoso a su masa de votantes tradicionales por formaciones que caricaturizan sus respectivas ideologías. Antes o después quizás ambas caigan en la cuenta de que podrían intentar maniobras comunes que las neutralizaran, sin por ello perder sus señas de identidad. 

La política española, y la alemana, y la mundial va ser más complicada cada día. Tendremos que ver cómo gestionamos problemas de cuya existencia no teníamos noticia. La España vaciada coincide en el tiempo con la explosión de las redes sociales, con pandemias y antivacunas, con Partidos que se mueven como hace medio siglo, con movimientos telúricos que tratan de reajustar el equilibrio político mundial, con masas de ciudadanos bombardeados a diario por millones de datos manipulados. Andamos juntos votantes desorientados, líderes indignos de tal nombre, y problemas de casi imposible solución.

No obstante, la nostalgia es dañina. Si de algo vale el pasado es como fuente de experiencia, nunca como refugio de frustrados: hay lo que hay, tenemos lo que tenemos, y sólo nosotros podremos hacer algo por nosotros mismos. Algunos han dado un paso al frente y se sienten miembros de "la clase política"; otros sólo tenemos nuestro voto. Pero, atención, los votos, como la energía, ni se crean ni se destruyen, sólo cambian de parroquia. Y si los Partidos de antes no evolucionan, lo harán sus votantes. Los clásicos tendrán que revisar sus lecturas, alterar sus dogmas, modernizar sus modos de acción, o perderán al ciudadano.

El español del primer cuarto del siglo XXI, también el salmantino, el burgalés, el palentino, se fía más de su teléfono que del telediario, no cree en las encuestas, y confía poco en líderes lejanos. Muchos trabajan en su casa, no se fían de sus sindicatos, ni de lejanos centros de poder. Es un votante más individualista que sus padres, y cuenta más para él una "influencer" o un "youtuber" que el Ministro de La Presidencia, que ni siquiera sabe quién es. Muchos de los datos con los que se maneja no son fiables, pero cree en ellos.


Termino ¿Me soportan un par de citas?

La primera, a propósito de la incertidumbre que provoca el auge de ideologías más o menos tóxicas, es de Pío Baroja: "el carlismo se cura leyendo".

La segunda viene a cuento de la tentación de meter las manos en el bolsillo y esconderse detrás de tu mesa camilla como si "La Cosa Pública" no fuera con ellos. Decía Arnold J. Toynbee que "el castigo para quienes no se interesan por la política es que serán gobernados por quienes sí se interesan".


Post Scriptum

En los agobiados momentos que vivimos, escribir algo un lunes y esperar que siga siendo actualidad el sábado es de una ingenuidad enternecedora. ¿Cómo podíamos sospechar que las hostilidades internas en el seno del PP saltaran de los semisótanos a las pantallas y a las primeras planas de todos los diarios españoles?

Espero, pese a todo, que dentro de una semana pueda comentarlo sin que otro cataclismo haya hecho envejecer la noticia.


 seguirán siendo problemas candentes y podremos hablar de todo ello.









sábado, 12 de febrero de 2022

 Elecciones en el corazón de España

¿Era necesario?

El Presidente de Castilla y León, en legítimo uso de sus facultades, rompió su alianza con Ciudadanos y convocó elecciones. Si la decisión estaba justificada o no es algo sujeto a la interpretación de quien quiera opinar al respecto. Si el resultado de la maniobra coincide con las intenciones de Fernández Mañueco, lo sabremos mañana por la noche. 

Hoy, día de reflexión para los votantes, es buen momento para comentar algunos aspectos del proceso que me han llamado la atención. Me pregunto si mi modesto blog estará sujeto al silencio reflexivo de las vísperas electorales, pero estoy convencido de que este post ni tiene relevancia suficiente para influir en el resultado, ni, por tanto, tengo que esperar al lunes para editar mis ocurrencias.

Alfonso Fernández Mañueco gobernaba la meseta norte en coalición con Ciudadanos. No había nubarrones a la vista; nada indicaba que su socio estuviera planteándose cambiar de aliado, pero convocó elecciones. Aspira a mejorar sus resultados y a gobernar en solitario. Legítimo propósito, desde luego, aunque…

Lo que dicen que hay detrás

Se comenta que no ha sido Fernández Mañueco sino el núcleo duro de Génova (Pablo Casado, Teodoro García Egea y dos o tres fieles más) quienes diseñaron la operación. Se trataba de alcanzar objetivos que poco o nada tienen que ver con la política castellano leonesa, sino con el camino de Casado a la Moncloa:

  • Repetir el resultado demoledor de Ayuso en Madrid: obtener una mayoría tan aplastante que la oposición, léase "Sánchez", es decir, el enemigo por antonomasia, quedara al borde del KO por penúltima vez.
  • Desbrozar el camino y señalar el rumbo para acaso repetir la jugada por tercera vez a la vuelta del verano en Andalucía y conseguir, también en el sur, una tercera victoria aplastante. Allí se trataría de soltar el lastre de la alianza con VOX para asentar la evidencia de que en la derecha, fuera del PP solo hay vacío.
  • Entronizar a Pablo Casado como la única voz relevante de la derecha española, de manera que, a partir del incontestable triunfo del PP en las próximas elecciones generales, la unión de las fuerzas conservadoras sólo pudiera llevarse a cabo por absorción de los restos, no por fusión, y, mucho menos, por coalición.

Todo esto no lo he visto reflejado en ningún documento del Partido Popular, pero tiene todas las trazas de haber pasado alguna vez por las cabezas pensantes de Casado y su círculo íntimo.

Lo que he visto y oído en la campaña

Mucho ruido, oradores vociferantes, actores que sobreactúan, imprecisiones, exageraciones, errores de bulto, algún que otro insulto, y, sobre todo:

  • "Sánchez" como el vocablo más repetido en los mítines. ¿De verdad creen los candidatos que el votante no sabe quién se presenta, qué necesitan en su pueblo y qué proponen unos y otros?
  • Formaciones políticas de nuevo cuño, pegadas al terreno, no ya regionalistas, sino localistas. Piden atención a sus problemas, a los suyos, no a los de las Ejecutivas de Partidos que tienen sus despachos en un lejano Madrid que les tiene olvidados, gobierne quien gobierne. Nadie se atreve a predecir su comportamiento el lunes por la mañana ¿a quién apoyarán, si fuera preciso, que lo será?
  • Una discreta campaña socialista sin errores de bulto, muy lejos de la que le diseñaron en Madrid a Gabilondo. Tal parece que esta vez han optado por dejar que el contrario les haga el trabajo por sus propios errores y confiar en el criterio de los viejos castellanos que podrían estar hartos de tanto ruido. Veremos si han acertado o no.
  • El Partido Popular se ha presentado con dos caras distintas: Casado apoya a Mañueco, Mañueco sigue a Casado e insiste una y otra vez en que quiere y necesita gobernar sólo. Al mismo tiempo, Aznar llama la atención sobre los efectos de la falta de contundencia de ciertos líderes, lo que equivale a poner a VOX de ejemplo, y Dª Isabel Díaz Ayuso, el modelo a imitar, la elegida por Mañueco para su cierre de campaña en Valladolid (significativo y preocupante para Casado, supongo), comenta que se entendería con VOX aunque no necesitara su apoyo. ¿Dos versiones distintas y un solo PP verdadero? No es la mejor estrategia para pedir el voto.
  • He visto mucho más consistente a Díaz Ayuso que a Casado. Éste vociferante, a veces descompuesto, siempre exagerado, fuera de control en alguna ocasión, errando en datos y en temas; aquélla, contenida y sabiendo seleccionar mensajes: claros, sencillos, eficaces, en línea con lo que mejor sabe hacer, que es jugar con frases simples pero retóricamente impecables. Tengo la impresión de que Casado navega sin rumbo definido, barruntando que los suyos sólo van a darle una oportunidad para ser Presidente de Gobierno. Teme tanto el fracaso que podría estar provocándolo.
  • VOX y el PSOE se frotan las manos: los primeros porque ni Aznar ni Casado han sabido establecer las diferencias teóricas entre su Partido y el de Abascal, así es que, tal como reflejan las encuestas, en caso de duda, uno tiende a irse donde más claras están las coas y menos ruido interno hay. Los segundos, porque tiempo habrá de dar la batalla contra VOX; ahora lo importante es desbancar al PP.

¿Y qué dicen las encuestas?

Por una vez hay una cierta homogeneidad en los resultados: 

  • Si dejamos aparte al CIS, que cada día que pasa se muestra más como una herramienta al servicio del Gobierno y no del Estado, todas hablan de un resultado incierto dada la alta tasa de indecisos, mas con una mínima, relativa y decreciente ventaja del ala derecha del abanico. Nadie va a conseguir mayoría absoluta.
  • La tendencia de los últimos días señala una pérdida de energía en las formaciones conservadoras. El PP podría obtener más votos que el PSOE pero insuficientes para gobernar en solitario. En el mejor de los casos, tendría que sustituir su alianza con Ciudadanos por el entendimiento con VOX y, para según quién, ni eso bastaría sin una tercera fuerza que se sumara a la ecuación.
  • Al final, podrían resultar determinantes los resultados que obtengan los nuevos actores, los que se dicen representantes de la región o de sus provincias. Nadie puede vaticinar hoy, víspera de las elecciones, cuál sería el sentido final de sus apoyos. Y es que "tanto va al cántaro a la fuente…" El paisanaje empieza a hartarse de los Partidos que sólo se acuerdan del vacío mesetario cuando hay urnas a la vista, así que las expectativas son inciertas.
  • Lo que sí resulta llamativo es la pintoresca tendencia de los diarios a interpretar los mismos resultados de las encuestas en sentido divergente, dependiendo, como es natural, de su propia tendencia ideológica. Cada cabecera dice lo que sus lectores esperan leer. Los fallos, inevitables, se cargarán a la impericia de los encuestadores.

El viaje y las alforjas

Todo lo cual, traducido al lenguaje popular podría llevarnos al conocido dicho de que para ese viaje no se necesitaban tales alforjas

  • Si las urnas dan a Mañueco una victoria a "lo Ayuso", Casado lograría que la marca PP saliera reforzada. La relevancia de Ayuso se diluiría un tanto y él afianzaría su sueño de llegar a La Moncloa. Por el momento pocos apuestan este resultado.
  • Si, por una vez, las encuestas dan en el clavo y el Partido Popular tuviera que pactar su Gobierno con VOX, habría resultado que no sólo él y Casado se quedan sin la añorada repetición del caso Ayuso, sino que tendrían como socio al Partido que más votos puede restarles en las elecciones generales. Resumen: ganan Aznar, Ayuso y Abascal, y pierde Casado. 
  • Si quien ha acertado es el Señor Tezanos, y los resultados del CIS son los buenos, ya no hay que hablar de viajes ni alforjas, sino del tan traído y llevado cuanto de la lechera: roto el cántaro al primer traspiés, don Pablo se encontraría pasado mañana, lunes, bastante más lejos de La Moncloa que antes de empezar todo este gratuito embrollo.
  • Va a resultar interesante ver cuásnto escaños logran Ciudadanos y los nuevos Partidos. Los ex socios de Mañueco ya han dicho que su formación está dispuesta a pactar con quien más se acerque a sus postulados (lo que equivale a decir que el PSOE puede ser una alternativa). ¿Sería compatible esta alianza con el apoyo de UP y el de los partidos de nuevo cuño a los socialistas?

En fin, amigos lectores, por una parte me alegro de que mi tierra, por una vez, adquiera un protagonismo nacional del que carecía desde la derrota de Villalar, y, por otra… pues que les deseo un buen fin de semana. Tiempo tendremos de oír a los portavoces asegurar, uno tras otro, que su jefe ha sido el gran ganador.


sábado, 5 de febrero de 2022

 Lecciones portuguesas y astracanadas hispanas

Al otro lado de "La Raya"

Uno, nacido y criado muy cerca de "La Raya", acostumbra a mirar lo que pasa del otro lado y tiene la impresión de que portugueses y españoles caminan bastante más cercanos de lo que unos y otros pensamos. Incluso hay veces que le da por soñar con la Federación Ibérica, como una realidad política que unificara nuestros destinos. Seguramente una locura, pero jamás una pesadilla.

El caso es que hace nada, António Costa, Primer Ministro portugués, harto de los caprichos de sus socios de Gobierno, disolvió el Parlamento y convocó elecciones generales. Hizo saltar por los aires la "Geringonça" y esperó los resultados.

Llevaba seis años en el Poder, al que llegó desalojando al ganador nominal de las elecciones, el conservador Passos Coelho, merced a la alianza entre el Partido Socialista, el Bloque de Izquierda y el Partido Comunista. El perdedor, tildó el invento de "Geringonça", es decir, chapuza, cacharro que no funciona.

Pero se equivocaba Passos Coelho: el Gobierno portugués ha conseguido recuperar la economía del país y mantenerse sin problemas durante más de un lustro. Luego… Los socios minoritarios se creyeron más imprescindibles de lo que eran, trataron de forzar situaciones no queridas por el sector mayoritario y terminaron encontrándose con la convocatoria electoral.

Bien, los votantes han hablado:

  • António Costa, es decir, el Partido socialista se ha alzado con la mayoría absoluta. Seguirá gobernando sin necesitar apoyarse en formaciones que empezaron siendo aliadas y terminaron complicándole la vida.
  • Los ciudadanos han dado la razón al Primer Ministro y han castigado a los socios minoritarios, el Bloque de Izquierda y el Partido Comunista han perdido escaños, fuerza e influencia política. No siempre, pero a veces los errores se pagan.
  • La extrema derecha, por el contrario, se afianza como tercera fuerza parlamentaria, en parte a costa de la Socialdemocracia lusa que, pese al nombre que ostenta, es, como se sabe, el Partido conservador.
  • También en Portugal se equivocaron las encuestas que apostaban en su mayoría por un empate técnico e incluso por la victoria de los conservadores. 

Cuando las barbas de tu vecino veas pelar…

Hasta aquí, lo que ha ocurrido en Portugal la semana pasada. Ahí, al otro lado de la Raya. ¿Algo que ver con lo que pasa en Celtiberia? Algo, aunque jamás nuestros vecinos perderán tanto tiempo como nosotros en insultarse.

  • ¿Le parece comparable la "Geringonça" portuguesa al "Gobierno Frankestein"? A mí me parece que sólo en parte: es verdad que Unidas Podemos puede parecerse a los socios del Partido Socialista portugués, pero António Costa, sin tantas alharacas como nuestro Gobierno ha obtenido resultados muy notables.
  • Creo, por otra parte, que tanto el Presidente español como sus levantiscos socios minoritarios deberían reflexionar, los unos lo que está en tu mano hacer cuando tu aliado se pasa de listo; y los otros lo que puede ocurrir cuando adoptas la postura de "criada respondona". Y esto tanto vale para socios de Gobierno como para apoyadores parlamentarios, hechos a la idea de que todo voto tiene un precio que debe pagarse al contado.
  • Y desde el otro extremo del espectro político, tampoco hay que subestimar las lecciones que Portugal ofrece: nada hay eterno en política; por ejemplo, el pueblo soberano de tanto en tanto cambia de líderes y encomienda al Partido B que defienda las esencias de una ideología que desde hacía muchos años era sostenida por el Partido A. Seguirá habiendo derecha e izquierda pero no siempre tendrán el mismo rostro. Relean la historia del país que mejor les cuadre y saquen sus propias conclusiones. 

Y, mientras tanto, por aquí...

Cuento lo que cuento porque en estos días estamos viviendo algunos episodios asombrosos ¡Qué no habría dado un renacido Benito Pérez Galdós para escribir sobre ellos!.

Por ejemplo, las elecciones en Castilla-León

  • La meseta norte está en campaña. Tengo entendido que son elecciones autonómicas. No obstante, el personaje más citado por el PP de la Comunidad concernida es Sánchez. Si es acertada o no la estrategia, ya se verá, por ahora me limito a señalarlo. Mi duda es si las elecciones se han adelantado para elegir Presidente de Castilla León o como ensayo general para cuando toque hablar del Gobierno de la Nación. O sea, si se han convocado desde Valladolid o desde Madrid.
  • Don José María Aznar, también a propósito de las citadas elecciones, ha dicho literalmente que "muchos se agarran a los populismos porque no tienen un referente fuerte en el que confiar”. Ustedes pueden interpretarlo como quieran, yo veo en esa frase una crítica al líder de su propio Partido. ¿Otro intento más, tan frecuente en la historia, de "matar al delfín"? ¿Cuándo se convencerán los "Ex" que no hay ningún sucesor que siga al pie de la letra las instrucciones de su predecesor?
  • Incierto, como el de Witiza, se presenta el reinado de Casado con Aznar y sus mosqueteros por un lado y Abascal por otro. ¡Y con Dª Inés tratando de gastar con tino sus últimos cartuchos! 

Y, para terminar, en medio de un clima de suspense, con diputados que ignoran las consignas de su Partido y gracias a, o por culpa del error de un parlamentario del PP, hemos visto unas insólitas parejas de baile en el sarao de la reforma laboral.

  • En menos de un minuto, el Real Decreto-Ley fue derogado y rehabilitado. El voto telemático de cierto diputado pepero se contabilizó al fin como un "sí". Unos dicen que fue error informático; otros aseguran que el error fue humano. Mientras las instancias judiciales se pronuncian (por menos motivo se ha hecho trabajar a los jueces), hemos tenido que oír el habitual coro de disparates. Señor Casado y señora Lastra: hablar de pucherazo y acusar a la Presidenta del Congreso de actuar a las órdenes de Sánchez, o dar por supuesto que los diputados de UPN que votaron contra el Real Decreto-Ley fueron sobornados por el PP, son sendas irresponsabilidades intolerables: nuestra democracia es más frágil de lo que ustedes suponen, y barbaridades como ésas no se pueden decir sin pruebas. ¿Estamos? Pues sigamos. 
  • Puestos de acuerdo empresarios y sindicatos todo debería haber sido más sencillo ¿Quién mejor que CEOE y los dos sindicatos mayoritarios para saber hasta dónde pueden llegar en sus concesiones mutuas? ¿Por qué perder ni un solo minuto en discutir si el Real Decreto-Ley deroga o no la reforma de Rajoy? Pero esto es España, donde cuenta más la derrota del rival que el triunfo propio.
  • El trío Sánchez-Díaz-Belarra (¿Les recuerda la "Geringonça"?) ha tenido que lidiar hasta el último aliento con unos apoyadores parlamentarios insaciables que no entienden que lo que ahora se jugaba era el orden y la estabilidad en las empresas de todo el país y que esta vez no tocaba cambiar votos por chinchorrerías localistas. 
  • No sé de quién habrá sido el mérito, pero lograr una mayoría alternativa al cansino mariachi habitual de abertzales y secesionistas, con los pragmáticos profesionales del PNV de eternos palmeros, a mí me parece una bendición. La evidencia de que hay otras combinaciones posibles abre el campo de juego y relativiza posiciones que muchos daban por fundidas en bronce.
  • Qué pocos han pensado en las necesidades de obreros y empresarios cuando han decidido sus votos. PNV se aleja del Gobierno porque no ha querido ceder terreno ante Bildu, un partido que se dice de izquierdas y vota contra una mejora en las condiciones de trabajo. ERC hace la mismo, no para bajarle los humos a Yolanda Díaz, sino para marcar territorio con el PdeCat, cuyas razones para apoyar el Decreto-Ley son las mismas pero vistas desde el otro lado. En cuanto al PP… otra vez más ha dejado claro que sólo piensa en cómo hacer caer a Sánchez (aunque a veces, como en este caso, pueda estar cometiendo un error estratégico de primer orden). Lo contrario que C’s que, aunque tarde, recupera su independencia y decide por sí mismo.
  • Y, por si fuera poco ¿No es maravilloso ver votar lo mismo a PP, VOX, PNV, Bildu y ERC? Piensen, piensen un poco nuestros representantes a partir de ahora cuando suban a la tribuno y empiecen a barbarizar sobre quién apoya a cada cual. 


Que tengan todos ustedes un buen fin de semana.