Contra el racismo
¿Recuerdan que mañana hay elecciones?
Las hay, vaya que sí, municipales en toda España y autonómicas en doce de las CC.AA.
Anoche terminó la campaña. Una campaña pintoresca en las que los personajes más activos, Sánchez y Núñez Feijóo, no se presentaban, los temas más candentes, derogar el sanchismo (algo que pase lo que pase falta medio año para que pueda ocurrir) o acabar con ETA (cosa que pasó cuando el malo era Zapatero), ni eran reales ni, de serlo, podrían haberse resuelto en ellas. Una campaña cuya candidata más mediática, no ha tenido a bien ni hablar de su Comunidad en la campaña, ni presentarse al debate televisivo, pensando, supongo, que ella sólo discute con Sánchez y eso con cita previa.
Unas elecciones que, en su último tramo, se han visto enturbiadas por el fantasma del castizo pucherazo a propósito de los problemas del voto por correo, primero en Melilla, llueve sobre mojado, y a renglón seguido, en varios puntos más de España.
No obstante, no tanto por respeto al silencio institucional impuesto por Ley en "el día de reflexión" que no va conmigo, sino porque creo que no todo lo que ocurre en España es electoralismo, me van a permitir que hoy les deje pensar en quién merecerá sus votos, y les reclame su atención sobre otro asunto que, sin ironía alguna, lo juzgo bastante más importante, contestar a una simple pregunta: ¿Es racista España?
Los hechos
Hace unos días, durante el partido entre el Valencia y el Real Madrid, algunos espectadores llamaron mono a Vinicius Jr., jugador del equipo madrileño, como medio mundo mundial sabe a estas horas.
Vinicius identificó al que le insultaba y se enfrentó a él. El juego estuvo detenido unos minutos. Luego, en el tiempo de descuento, trifulca tabernaria a resultas de la cual el árbitro expulsó a Vinicius por agresión a un contrario.
Revisados los hechos, el Comité de Competición retira la tarjeta roja al jugador, toma medidas contra el árbitro del VAR por suministrar información sesgada al árbitro, y sanciona al Valencia con la clausura de una parte de su estadio durante cinco jornadas, que luego se ha rebajado a no recuerdo cuántas.
A partir de ese momento, se suceden las declaraciones de los entrenadores de ambos equipos, de los directivos del Madrid y del Valencia, del Presidente de la Federación de Fútbol, del de la Liga, y, lo que es más sorprendente, de un alto funcionario de la ONU y del Presidente de Brasil que acusa a España de racista. Por el momento no hay noticas de la Prefectura Apostólica ni de los Adventistas del Séptimo Día , pero no se descartan.
Vinicius Jr.
Jugador brasileño, 22 años, carácter volcánico, exuberante, pasional. Táctica, técnica y artísticamente, un superdotado: rápido, ágil, driblador, con capacidad para asociarse, es uno de los mejores del mundo en su puesto.
Polémico, por otra parte. Dado a provocar al contrario, a entrar en todos los charcos, sufre, no obstante o quizás por todo ello, el mayor número de faltas de toda la liga. No es un caso único. Vinicius es comparable como futbolista a otros brasileños que hicieron historia, Didí, Roberto Carlos, Ronaldo Nazario, Ronaldiño, Romario, Rivaldo, Bebeto… Y por su conflictividad como sus más recientes antecedentes: Alves o Neymar.
Comparte, por último, con genios como Messi o el mismo Neymar el haber sufrido más faltas que nadie y con buena parte de los citados, pero no con todos, el haber sido víctima reiterada de insultos racistas.
Algunas preguntas
- ¿Está justificado insultar con epítetos racistas a un futbolista provocador? Antes de contestar, piensen ¿Es culpable de su propia violación una minifaldera que camina sola por la noche en una zona poco iluminada? Si llevo a la vista un Rolex en la muñeca y me asaltan para robármelo ¿Soy yo el culpable? O debemos dar por cierto que los delincuentes son el que insulta, el violador y el ladrón. No tendíamos que dudar: en casos como los que cito, las violadas, los robados y los insultados, son siempre, siempre, siempre víctimas.
- ¿Los insultos a jugadores brasileños o africanos son sólo racismo o tienen, además un componente clasista? ¿Por qué se insulta a los negros africanos o sudamericanos y no japoneses ni a los afroamericanos?
- ¿Por qué se insulta con tanta frecuencia en el fútbol y no en el baloncesto donde hay más negros que en el fútbol? Es curioso, pero con las mujeres deportistas y los insultos machistas pasa igual: sólo los sufren las futbolistas, pero no las velocistas, las tenistas o las jugadoras de baloncesto o balonmano. ¿Tendrá algo que ver en este fenómeno con la educación de los espectadores?
- ¿Por qué no se aplican siempre, no importa a qué precio, las disposiciones legales en vigor?¿Por qué no se suspende un partido cuando hay gritos racistas?
- Entrando en otro terreno ¿Por qué puede silbarse el himno nacional o la presencia del Rey sin que pase nada? Y, en tono menor ¿Por qué puede insultarse a un árbitro poniendo en duda la moralidad de su madre sin que nadie se extrañe? Imaginen la escena contraria: descanso del Barça/Real Madrid, con la liga en juego. El trencilla que ha sido insultado por medio estadio por anularle un gol al propietario del campo, pita el descanso, va hasta el círculo central, agarra un megáfono y llama putas a las mamás de los 93.426 espectadores que abarrotan el campo ¿Qué creen ustedes que sería del árbitro?
- Es cierto que la inmensa mayoría de los asistentes al partido de marras no llamaron mono a Vinicius pero ¿Cuántos de los que rodeaban a los que lo insultaron les afearon su conducta? ¿No les ha parecido, viendo las imágenes, que estaban más de parte de los energúmenos que de la víctima?
- ¿Habría alzado su voz Lula da Silva si los hechos hubieran ocurrido en los Estados Unidos? Recuerdo una frase memorable de Eduardo Galeano: "América Latina trata a sus indios como las grandes potencias tratan a América Latina". Sé que no es su caso, pero ya que no condena la invasión de Ucrania, podría Lula gastar sus energías en defender los derechos de tantas minorías oprimidas en su propio país. En resumen: no confundir condena del racismo con oportunismo político, aunque Vinicius tenga pasaporte brasileño.
Dejo para el final la pregunta del millón¿Es España un país racista?
Creo que la pregunta está mal formulada. Los países son realidades virtuales, convenciones sociales, híbrido de mito y contrato social que integran tal cantidad de elementos que impiden contestar preguntas referidas a ellos tan aparentemente sencillas como ésa.
Carlo Ancelotti, dijo que "España no es un país racista, pero hay racismo en España". Tiene razón, pero eso es una obviedad que no nos permite avanzar: hay racistas en todas partes, desde el Congreso Nacional Africano hasta el Sínodo de Obispos; ésa no es la cuestión, sino qué podemos hacer para identificar el racismo allá donde se manifieste y qué pensamos hacer antes y después de que hechos como los que comentamos se produzcan. Porque, no lo dudemos, volverán a repetirse.
¿Hay, insisto, racismo en España?
Por supuesto que sí.
- Siempre lo ha habido, aunque nos hayamos pasado la vida diciéndonos que en España no había racismo. Lo que no había era negros. Y como decía Winston Churchill "en los países habitados por una sola raza es fácil tener ideas generosas y elevadas sobre las cuestiones raciales".
- Pero sí había gitanos ¿verdad? "Sí, pero es que los gitanos son diferentes ¿o no?", Sin caer en la cuenta de que detectar esa diferencia y usarla como palanca de discriminación, es la esencia misma del racismo.
- Racismo y xenofobia, con tintes clasistas, eso es lo que padecemos. Admitimos a japoneses, alemanes, canadienses o Caballeros de la Orden de Malta y despreciamos a hispanos, africanos y filipinos. ¿Por qué? porque estamos convencidos de que son menos que nosotros y que si nos mezclamos, el resultado de la mezcla es empobrecedor. Este axioma sobre las consecuencias de las mezclas raciales lo trató en profundidad un tal Adolfo Hitler en "Mein Kampf".
- El lenguaje es más significativo de lo que suponemos. Negritos, sudacas, panchitos, champis, machupichus, moracos, ¿Por qué no hay términos parecidos para referirnos a escandinavos, centroeuropeos, italianos o franceses? "¡Es que son europeos, como nosotros" Ya, como nosotros. ¿Hemos olvidado que Europa nos mantuvo en el arrabal, sin dejarnos entrar en su club por nuestras carencias democráticas? ¿Las españolas que servían en París eran "Conchitás" o no?
- Y puestos a no olvidar posibles orígenes de nuestro clasismo racista o de nuestro racismo clasista ¿Recuerdan la expulsión de los judíos y la de los moriscos? Yo las estudié como si hubieran sido otros jalones más en la senda de la grandeza de España. Y cinco siglo después ¿les suena la cantinela de la conjura judeo masónica? ¿Lo de Judeo tiene algo que ver con el racismo? ¿Y los postulados de algún Partido a propósito de la inmigración, relacionándolos con la defensa de nuestros valores eternos no son racismo puro y duro?
Concluyendo
Por lo que refiere a Vinicius:
- Si es un provocador, que se le aplique el reglamento; eso es algo que corresponde a los árbitros.
- Si es el sujeto pasivo de insultos racistas, aplíquese también el mismo reglamento, aunque haya que vaciar un estadio y mantenerlo cerrado el tiempo que toque.
Por lo que se refiere al fondo de la cuestión
- ¿Es que no nos hemos dado cuenta de que tenemos un problema que hace imprescindible repensar en qué falla la educación que están recibiendo nuestras jóvenes generaciones?
- Y en tanto rinde sus frutos la educación que no tenemos ¿No habría que consensuar una legislación específica que contemplara la prevención y la corrección del fenómeno?
- Si emprendemos este camino, educación, corrección, sanción, por favor: trátese como una cuestión de Estado, no como una bandera populista. Sólo nos faltaba que al día siguiente de aprobar la Ley, el líder de la oposición, el que lo sea en ese momento, anunciara con voz tonitronante que su Partido se compromete a derogar la Ley en cuanto llegue a la Moncloa.
- ¡Que ustedes voten bien!