Asuntos internacionales o controversias domésticas
No lo hemos inventado nosotros
Ni es la primera vez ni será la última, ni España es un caso excepcional. Ha habido, hay y habrá ocasiones en las que las confrontaciones entre ideologías y formaciones políticas se hacen pivotar sobre cuestiones que en apariencia podrían englobarse en la denominación genérica de “Relaciones Internacionales” cuando, en realidad, estamos en presencia de pugnas internas.
No se trata de cómo articular las relaciones con otros Estados soberanos, sino de apuntalar o desgastar al Gobierno de un país o de desviar la atención de la ciudadanía en momentos en los que la situación interna es delicada.
¿Algunos ejemplos? Cuando Nikita Jruschev se quitó un zapato y golpeó con él su pupitre en la Asamblea General de la ONU, no estaba agraviando a la comunidad internacional (no era su objetivo, quiero decir), sino dando a sus ciudadanos una muestra de firmeza y una prueba de su campechanía, al mismo tiempo.
Cuando la Junta Militar Argentina invadió las Malvinas, pretendió enardecer a su ciudadanía en momentos en los que el prestigio de la Junta golpista estaba bajo mínimos.
El General Franco agitaba a las masas con sus reivindicaciones anglófobas a propósito de Gibraltar para desdibujar las penurias internas.
Obama, y ahora Trump, juegan con fuego, y entran en lo que ellos llaman “conflictos de baja intensidad” como herramienta electoral.
Bien, pues aquí y ahora, parecemos empeñados en utilizar nuestras relaciones internacionales como argumentario en la enfebrecida política interna.
El Parlamento Europeo investigará crímenes sin resolver de ETA
Sí, así es: la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo ha acordado el martes de la semana pasada enviar al País Vasco una misión de investigación para reunir información por los 379 crímenes de la banda terrorista ETA aún sin resolver, aunque el calendario y la agenda del viaje están aún por definir.
La iniciativa corresponde a Ciudadanos y ha contado con los votos a favor del PP y de Vox, más las ayudas necesarias de otros países para que la petición saliera adelante.
Se me ocurren algunas reflexiones y varias preguntas
- No debe de quedar ninguna duda de que la desaparición de ETA, la derrota de ETA, no puede significar en ningún caso que los crímenes pendientes dejen de investigarse y de que, en su momento, si se detiene a los culpables, han de ser puestos ante el juez y juzgados sin privilegio alguno. Lo contrario sería tanto como que la noticia de la disolución de una banda de atracadores fuera razón para olvidarse de los asaltos pendientes de esclarecimiento.
- Hasta donde sabemos, ningún representante del Estado ha dicho lo contrario. ¿Ha habido antes alguna iniciativa semejante que se haya intentado en nuestro Parlamento y que no haya podido llevarse a cabo?
- Tenía entendido que Vox, PP y C’s eran, y les honra, ardientes defensores de nuestras fuerzas de orden público y de nuestra judicatura. ¿Desde qué día y hora han perdido Jueces y Policías y Guardias Civiles la confianza de Dª Inés, Don Pablo y Don Santiago?
- Los intentos de internacionalizar el conflicto catalán son radicalmente perjudiciales para España. ¿Qué gana el prestigio de nuestro país con el trabajo de esta Comisión de investigación? ¿No equivale a decir que no sólo el Gobierno sino Fuerzas de Orden Público y Jueces son una banda de inútiles?
- Todavía no se han acallado los ecos del debate sobre las medidas a tomar con Hungría y Polonia en vista de los intentos de ambos países de influir en el funcionamiento de la justicia. Vox, PP y C’s votaron en contra de aplicares cualquier correctivo con el argumento de que eran cuestiones internas y de que, por tanto, el Parlamento Europeo no era quién para intervenir. ¿Entonces no y ahora se pide al mismo Parlamento que venga a España a sacarnos los colores?
En resumen:
- Lo que de verdad se busca es deteriorar al Gobierno, sea cual sea la herramienta que se utilice.
- La oposición está para oponerse (igual de ahí le viene el nombre) pero uno, en su inocencia, pensaba que había cosas con las que no debía de jugarse. Por ejemplo, el prestigio de tu propio país.
- ¿Alguien recuerda lo que tantísimos hemos dicho y otros muchos más han pensado a propósito del infame intento de internacionalizar el conflicto como medio para resolver asuntos internos? Primero lo intentó ETA, el secesionismo catalán, más tarde. Se ve que no hay dos sin tres.
El Presidente Encargado Guaidó, la Ministra Venezolana de Exteriores y nuestro Gobierno
Juan Guaidó, Presidente de la Asamblea Legislativa y Presidente Encargado de Venezuela, ha venido a España, ha sido recibida por la Ministra española de Asuntos Exteriores, por el Alcalde de Madrid, por el Presidente del PP, no sé si por alguien más, pero no lo ha sido por el Presidente del Gobierno. Don Pedro estaba en la gala de los Premios Goya, vaya por Dios.
Quién y qué es Juan Guaidó. Prefiero que cada uno se documente como pueda para que nadie diga que estoy manipulando al lector. En cualquier caso, hay algunas evidencias difíciles de enmascarar:
- Guaidó, con los apoyos internaciones que son de sobra conocidos, se autoproclamó Presidente de Venezuela, con el compromiso de convocar elecciones en cuanto las circunstancias lo permitieran. Estas circunstancias es indudable que no se han dado aún, luego no puede decirse que haya incumplido promesa alguna.
- La mayoría de los países europeos, el mismo Parlamento Europeo, Los Estados Unidos, Canadá y un buen puñado de países hispanos, han reconocido al Sr. Guaidó como Presidente de Venezuela.
- Nicaragua, Rusia, China, Irán y Turquía no lo reconocen y mantienen su apoyo al gobierno de Maduro Países como México y Uruguay o Argentina se mantienen en una posición intermedia.
- España, el Gobierno de España presidido por Pedro Sánchez, fue de los primeros en reconocer al nuevo Presidente. Hablo de los tiempos en los que Podemos quitaba el sueño al Presidente.
Bien, pues a lo hecho pecho, que dice el pueblo ¿Sí? Pues no.
España no estaba obligada a reconocer a Guaidó y lo hizo. Con todas sus consecuencias. A partir de ese momento y hasta que no hubiera una decisión formal en contra, el Sr. Guaidó, no importa quién sea el Vicepresidente Segundo del Gobierno de Las Españas debe ser tratado como nosotros mismos hemos dicho que se merece: como Presidente de un país amigo.
Ocurre, no obstante, que el el tan traído y llevado Sr.Guaidó se he metido en viajes en procura, supongo, de apoyos para su causa y ha pretendido mantener reuniones con sus homólogos de los países que anda visitando (Reino Unido, Francia, Alemania, Canadá… Y España).
Casi logra el pleno: Boris Johnson, Angela Merkel, Emanuel Macron, Justin Trudeau lo han recibido, se han fotografiado con él y han hablado. Si ha conseguido algo más que hablar y sacarse unas fotos, está por ver.
España… No, Spain is different, tal como ya se decía en tiempos de Don Manuel Fraga. El Sr. Guaidó ha recibido las llaves de oro de la ciudad de Madrid, no sé qué otra garambaina de manos de la Presidenta de la Comunidad, ha tenido la oportunidad de ver, hablar y hacerse fotos con Casado, pero “al que viene siendo” Presidente del Gobierno no ha habido manera. Ya digo: como andaba por Málaga… Pues eso, que tuvoue conformarse con laMinistra de Exteriores
Y luego viene la Ministra Calviño y dice en Los desayunos de la 1 que “ha sido recibido al máximo nivel”. Pues no, señora: al máximo nivel, en Canadá, Gran Bretaña, Alemania y Francia. Aquí lo hemos dejado un par de escalones por debajo, aunque él no se haya quejado, al menos en público.
Y eso es lo que no tiene ni pies ni cabeza: nadie nos obligaba a seguirle el juego a Trump, pero lo hicimos, así que como decía “a lo hecho pecho”: hemos quedado como cocheros.
Lo que, en cambio, tiene en mi opinión menos importancia es si Ábalos se vio, se reunió, se encontró por casualidad, tenía una cita o se tropezó con la Ministra de Asuntos Exteriores del otro Presidente de Venezuela, es decir la Ministra de Maduro.
Por lo que leo, no parece que la Unión Europa vaya a hacer de esta historia o historieta un casus belli, ni que nos vayan a echar los perros, por mucho que le moleste al trío opositor.
Aunque, bien mirado ¿para qué lo necesitan? Entre Ábalos, Sánchez, Calviño y la Ministra Portavoz están dando material más que suficiente para montar un tremendo serial a partir de un grano de arena.
¿Cómo pueden darse tantas versiones y tan diferentes de un solo episodio que duró minutos? ¿Lo hacen a propósito o es que son incapaces de ponerse de acuerdo entre ellos no ya para hacer, sino para decir lo que han hecho?
El seguidismo y su precio
Así que observo el patio y veo que los que antes eran los dos grandes Partidos de España, los que mal que bien nos han venido gobernando desde que los ciudadanos tenemos algo que decir, están ambos en manos de sus respectivos socios, si es que lo son, porque a veces, más que eso parecen secuestradores.
¿Se dan cuenta? El de la derecha se escora a su derecha; el de la izquierda, lo hace a la izquierda. En medio… Nada, hoy por hoy, porque Dª Inés más parece empeñada en que la dejen entrar en el ajo que cree que se cuece a su diestra, que en reencontrar su lugar bajo el sol.
El PP parece incapaz de establecer otra estrategia que no pase por competir con Vox en propuestas bárbaras y en el calibre, grueso, desde luego, de los adjetivos "descalificativos"
El PSOE, dice que no, pero hace lo mismo. Gritan menos, pero...Vean con quién hablan, de qué hablan, qué anuncian que van a hacer y díganme si no estoy cerca, de la verdad.
Y el Independentismo catalán a la greña (al fin una buena noticia), y el PNV calladito, calladito hasta que se conozcan los borradores de los Presupuestos.
Y los contribuyentes cada día un poco más alejados de sus representantes.